COMUNICADO: 31 años Tzome Ixuk

Las Margaritas, Chiapas a 7 de febrero de 2025
Saludamos hoy a nantik-tatik lu’um
Saludamos a nantik-tatik k’ak’
Saludamos a nantik-tatik ja’
Saludamos a nantik-tatik ik’
Saludamos al icham
Saludamos al cerro chintahual
Saludamos a los ríos, lagos, lagunas de Las Margaritas
Saludamos a nuestras abuelas y abuelos. A quienes se nos adelantaron, a quienes siguen ya quienes vienen todavía en camino.
Les saludamos a todas, todos y todes ustedes.
El 13 de julio (5 de febrero) cumplimos 31 años de lucha y resistencia.
Este año lo recibimos con un sabor agridulce, estamos muy alegres pero al mismo tiempo preocupadas.
Llegamos al 2025 con dolor en nuestros corazones porque el año pasado nana Tela partió hacia la eternidad para acompañarnos ahora desde otro plano.
Llegamos con mucha rabia y dolor en nuestro corazón colectivo por todo lo que está pasando en este mundo.
Pero también llegamos con mucha esperanza porque seguimos tejiendo comunidad desde otros varios espacios y con muchas varias hermanas de lucha.
Ayer que estuvimos platicando qué poner en este comunicado, lo primero que decidimos es denunciar y reconocer:
• Denunciamos el avance de los gobiernos capitalistas de muerte en todos los territorios. Gobiernos que siguen despojando, violentando, persiguiendo, criminalizando, desapareciendo y asesinando. Gobiernos que siguen promoviendo las guerras, porque siempre han estado en contra de la vida.
Ante esto, reconocemos el invaluable trabajo de las defensoras y defensores de los territorios, de los pueblos y colectividades que resisten desde la digna rabia y la rebeldía, a pesar de las guerras, porque la lucha es y siempre será por la vida.
• Denunciamos las políticas migratorias asesinas de Estados Unidos, México y otros países contra nuestras hermanas y hermanos en movilidad.
Ante esto, reconocemos el valor, la dignidad, la organización de las personas, que aún con miedo, están saliendo a las calles para exigir sus derechos. Reconocemos también las muestras de solidaridad de las comunidades, albergues, organizaciones que no dejan de acompañar, de ofrecer techo, de ofrecer comida, de ofrecer esperanza en medio de tanta incertidumbre.
• Denunciamos que los gobiernos nacional, estatal y municipales nos siguen presentando la militarización de los territorios como parte de su estrategia de “seguridad” para las comunidades.
Sus policías no son para cuidar a los pueblos, son para cuidar sus intereses personales e institucionales . Ante esto, reconocemos el trabajo de las organizaciones de base y de la sociedad civil que han denunciado y seguirán denunciando el actuar violento de las fuerzas de seguridad.
• Denunciamos el hostigamiento y la negación histórica de justicia y verdad hacia las madres y personas que buscan a sus desaparecidas y desaparecidos. Denunciamos la persecución de los estados contra nuestras compañeras y comunidades de diversos territorios: Lolita Chávez en Guatemala, Adriana Guzmán en Bolivia, Kenia Hernández en México, a la OFRANEH y comunidades Garífunas y campesinas en Honduras, a ADES y la comunidad de Santa Martha en El Salvador, a los pueblos originarios de México y las comunidades zapatistas.
Ante todo esto, reconocemos la fuerza, la lucha, la resistencia de cada una de las mujeres y comunidades que nos seguimos organizando para sostenernos, para cuidarnos, para no claudicar ante este sistema que nos quiere calladas y desorganizadas . Abrazamos a todas esas madres y padres que no pararán ¡hasta encontrarales!
Y ante todo esto que estamos denunciando y reconociendo, como segundo punto les queremos contar que nosotras nos seguimos organizando aquí en nuestras familias, en el barrio y en el municipio para continuar resistiendo en comunidad. Estamos felices porque llegamos a los 31 años, que no han sido fáciles, pero llegamos alegres y juntas.
El año pasado fue duro, pero nos sentimos muy abrazadas y acompañadas de nuestras hermanas de lucha. Cerramos en diciembre enredándonos: no es que nos hicimos bolas, o bueno sí, pero en una bola organizada que nos permita seguir construyendo los mundos que tanto hemos soñado.
En este andar de 31 años, y como tercer punto, les queremos agradecer a todos, todos, todos con quienes nos hemos encontrado para seguir abriendo brecha, para seguir sembrando la milpa. Gracias por ser parte de este corazón colectivo.
Y como cuarto y último punto, les queremos decir que nosotras seguiremos dando lata . Vamos a seguir compartiendo nuestros saberes ricos, nuestros saberes alegres. Seguiremos intentando enseñar y aprender a andar los caminos de libertad . Porque creemos firmemente que más allá de ver si alguien está de cabeza, es ayudar a ponerse de pie y levantar el puño para seguir luchando y resistiendo.
Que vengan 31 años más y que nos encuentren organizadas, bailando y comiendo elotes de nuestra milpa colectiva.
Así sea